Según informaron este miércoles los investigadores Francisco Fazio, Norberto Mollo y Juan José Mecchi, en un camino vecinal situado en la provincia de Córdoba, a escasos mil metros al sur del casco de la Estancia La Amalia, fue depositada por un vecino del lugar una vaca con evidentes signos de mutilación. El sitio del hallazgo se encuentra a unos 17 Km. al sudoeste de la ciudad de Rufino, y a unos 5 Km. de donde se descubrió un ternero mutilado el año anterior. Los investigadores se trasladaron al lugar luego que un trabajador de dicha estancia informara lo sucedido. El animal habría muerto en un campo vecino, situado al sur de dicho camino, y depositado posteriormente en el mismo. El animal parece tener al menos 10 días de muerto, debido a su avanzado estado de putrefacción, por lo que cabe estimar su deceso alrededor del 15 de agosto de 2003. Pese al tiempo transcurrido, no se observa absolutamente ninguna evidencia de ataque de predadores naturales; sólo el excremento de algunas aves que se apoyaron sobre el cadáver. La vaca presenta un notable corte más o menos ovalado en la zona del maxilar inferior, que deja bien visible gran parte de ese hueso y parte del maxilar superior (ambos del lado derecho). El corte no presenta interrupciones ni rasgaduras, lo que hace suponer que se realizó de una sola vez. El hueso del maxilar inferior se halla completamente pelado y no presenta rasguños ni marcas de ningún tipo. También se observa el faltante de la lengua, el ojo derecho fue extraído y la oreja derecha fue cortada casi al ras, notándose claramente las cicatrices del corte. En la parte posterior el animal presenta un orificio de gran tamaño, sumamente esférico, que denota la ausencia de ano y vulva, advirtiéndose que el interior del vacuno está prácticamente vacío. Tampoco se perciben rastros de sangrado. Este caso es uno más de los tantos que se han producido durante el año 2003 en las pampas argentinas, sin que hasta el momento se haya encontrado una respuesta satisfactoria a este misterio.